Por fin hay movimiento en largo camino de darle al castillo de Marbella la presencia que merece como uno de los principales símbolos históricos de la ciudad. Desde hace unos días las murallas Este y Norte del castillo de Marbella se han cubierto de andamios y sus jardineras están siendo retiradas.
El castillo de Marbella afronta el final de la Fase II del Plan Director del Castillo. Este documento estratégico fue puesto en marcha por el Vocal de Cultura de la Comisión Gestora de Marbella Francisco Moreno allá por 2008. Dos años después, en 2010, fue autorizado por la Junta de Andalucía tras su paso por la Comisión de Patrimonio. El Plan Director se articula en varias fases. La I ha supuesto estudiar el origen del castillo, analizar sus estructuras emergentes, hacer catas arqueológicas y, en definitiva, diagnosticar su estado. La Fase II supone rehabilitar los elementos que necesiten arreglo, consolidar y restaurar los lienzos, eliminando las patologías que afectan a las murallas. También estipula la eliminación de elementos modernos añadidos, como las almenas y jardineras. Es en este punto en el que estamos ahora. Por último, la Fase III abunda en convertir el reciento fortificado en un parque arqueológico con un centro de interpretación que ayude a divulgar el conocimiento sobre esta fortaleza milenaria.
Los trabajos actuales, la parte final de la Fase II, ha tardado varios años en hacerse realidad. El Ayuntamiento consiguió en 2018 una subvención del gobierno central a cuenta del 1.5% Cultural del Ministerio de Fomento. Sin embargo, Hacienda bloqueó los cerca de medio millón de euros consignados ya que se constató que la Agencia Tributaria consideraba moroso al Ayuntamiento, porque ingresó el 26 junio de 2018 un cheque de 12 millones de euros procedente de la venta de bienes del ex asesor de Urbanismo José Antonio Roca. Debido a que se hizo dos días antes de que se aprobaran los Presupuestos Generales de 2018 (que contenían una disposición que facultaba al Ayuntamiento a actuar así) Hacienda reclamó el dinero e incluyó al Ayuntamiento de Marbella en su lista de morosos.
El dinero consignado para arreglar las murallas se desbloqueó a primeros de año y desde hace unos días los operarios están trabajando en los lienzos del castillo y se están despejando las jardineras para hacer más visibles las murallas de esta fortaleza de origen romano ante los vecinos y turistas. Los trabajos durarán hasta marzo de 2023, cuando está previsto que se culmine la fase II.
¿Cuál será el siguiente paso? Según ha revelado la Directora General de Cultura Carmen Díaz, “para primeros de año tenemos previsto crear unos itinerarios que permitan a los visitantes recorrer parte de las murallas por el paseo de ronda. También se adecuarán varios miradores con carteles explicativos desde los cuales puedan ver el casco histórico de la ciudad desde un punto de vista totalmente nuevo”. La Directora General de Cultura también tiene la intención de instalar un sistema de iluminación que potencie la visibilización atractiva del castillo por la noche.
Díaz también ha adelantado que en unos meses se organizarán unas jornadas históricas con conferencias para explicar el origen e historia del castillo y su transformación presente y futura.
FASE III: ¿DONDE IRÁ EL CENTRO DE INTERPRETACIÓN?
Respecto a la Fase III, la que debe darle un uso cultural a la fortaleza romana y que tiene como gran hito la creación de un centro de interpretación, desde Cultura aseguran que es Alcaldía la que debe impulsar esta Fase III. Hay muchas incógnitas: ¿Qué pasará con los dos colegios existentes dentro del recinto amurallado? ¿Dónde se ubicará el centro de interpretación del castillo? ¿Hay plazos previstos? ¿Cuánto dinero hará falta para culminar la Fase III?
Hay que tener en cuenta otra cuestión respecto a la ubicación del futuro centro de interpretación del castillo: la parcela propiedad de Endesa sin uso y en cuyo interior se encuentra la antigua casa señorial de Los Domínguez, en la que estuvo alojado el rey Felipe IV hace 400 años en su visita a Marbella. En su momento, el anterior alcalde José Bernal mantuvo conversaciones con directivos de Endesa que confirmaron su disposición a ceder al Ayuntamiento esta parcela por otra de titularidad municipal fuera del casco antiguo. Pero ahí quedó la cosa, no ha habido movimientos por parte del actual equipo de gobierno municipal para hacerse con la titularidad de los terrenos de Endesa. Una parcela de una indudable importancia arqueológica.
Por lo pronto, el Plan Director del Castillo de Marbella avanza, con una lentitud desesperante, pero avanza. Mucho se ha hecho y aún queda mucho más por hacer, y mucho dinero por invertir, hasta que esta fortaleza se convierta de verdad en la principal joya histórica del municipio.