Agentes de la Policía Nacional han detenido en Marbella) a tres falsos agentes inmobiliarios por su presunta responsabilidad en los delitos de estafa, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal. Los investigados, dos mujeres y un hombre, de entre 34 y 43 años, se hacían pasar por agentes de una inmobiliaria con sede social en la localidad -para la cual nunca habían trabajado- y, a través de documentos falsos y una serie de artimañas, engañaban a particulares que buscaban vivienda de alquiler en la ciudad, transfiriendo estos importantes sumas de dinero a varias cuentas de la trama, en concepto de reserva. Según la investigación, los sospechosos se habrían embolsado unos 20.000 euros con este tipo de fraude.
La investigación, llevada a cabo por agentes adscritos a la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría de Marbella, se inició a finales de febrero a partir de una denuncia de un ciudadano que comunicaba haber sido víctima de una estafa en el alquiler de una vivienda.
El denunciante llegó a hacer tres transferencias a distintas cuentas bancarias del entramado por un importe total de 6.070 euros, en relación a la reserva y fianza de un inmueble en alquiler. El perjudicado contactó con una mujer que decía ser agente inmobiliaria, habiendo contactado con la misma a través de un portal en Internet.
Se hacían pasar por clientes ante agencias inmobiliarias
Según las indagaciones, los sospechosos se hacían pasar por clientes ante las inmobiliarias de la zona y conseguían información relevante de los pisos en alquiler. Posteriormente, por medio de una serie de tretas, se publicitaban en Internet y contactaban con personas que buscaban piso, cerrando los tratos y facilitando contratos falsos de arrendamiento -donde constaban datos de terceras personas ajenos a la trama-.
En uno de los hechos denunciados, los investigados convencieron a uno de sus clientes para que llamase a un cerrajero y este le facilitara el acceso a “uno de sus inmuebles”, alegando que el anterior inquilino se había marchado sin devolver las llaves. Posteriormente, la víctima conoció -por sus nuevos vecinos- que el piso no estaba realmente en alquiler y que, sin saberlo, lo había “ocupado”.
Amenazas y coacciones
En otro de los hechos, un integrante de la red amenazó a una de las víctimas con llevarle a “dos matones”, en el momento en el que aquella se percató de la estafa y exigió la devolución de una transferencia.
Finalmente, tras arduas labores de investigación, los agentes identificaron y localizaron a los tres integrantes de este grupo criminal, siendo detenidos por su presunta implicación en los hechos. Los investigados, con antecedentes por delitos de la misma naturaleza, ya han sido puestos a disposición judicial. De los hechos conoce el Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella.