Las carreras de montaña están de moda. El conocido como trail running ha llenado de corredores las sierras malagueñas y españolas. La gran prueba pionera, y la más famosa de esta modalidad deportiva, son los 101 kilómetros de la Legión, aunque hay muchas más y más duras si cabe.
Las competiciones de trail running atraen a muchas personas amantes de la Naturaleza y deseosas de probar su resistencia y dos sampedreños han rizado el rizo. Víctor Manuel Doblas Bernal y Pedro Jesús Domínguez Rincón son miembros del Club San Pedro Atletismo y acaban de realizar una gesta deportiva al alcance de muy pocos: han realizado casi sin parar y en autosuficiencia dos de las pruebas de trail running más duras de España, la Gran Vuelta Valle del Genal y la Ultra Trail 100 Millas Sierras del Bandolero, conocido como el 8 Andaluz. Las cifras son mareantes: han recorrido más de 300kms, con 12.900 metros de desnivel positivo (en subida) y lo han hecho en 71 horas y 56min, una hora por debajo del tiempo de corte que exigen las dos pruebas conjuntas.
Víctor es ingeniero y Pedro chapista, viven en San Pedro y sonríen satisfechos ante el logro de haber completado esta gesta casi inhumana. “Lo más satisfactorio es haberlo conseguido dentro del tiempo de corte oficial de las dos pruebas, que es de 73 horas, con lo que nos sobró una hora y teniendo en cuenta que hicimos unos 10-12 kilómetros de más, porque extraviamos el camino varias veces”, explica Víctor.
Los dos compañeros se tomaron como un reto la realización del 8 Andaluz. Al ser en autosuficiencia cargaron en sus mochilas con unas prendas de abrigo, linternas frontales para la noche y un surtido de barritas y geles energéticos y poco más. “Sólo nos permitimos, durante los tres días, comernos un bocadillo y una coca cola que comprábamos en uno de los pueblos por donde pasamos”, relata Pedro.
Prado del Rey fue el punto de partida, y de retorno, haciendo primero la Ultra Trail Sierras del Bandolero, pasando por pueblos como El Bosque, Benamahoma, Villaluenga del Rosario, Montejaque, Ronda, Benaoján y Jimera de Líbar para, desde este pueblo del valle del Guadiaro, saltar al del Genal por Atajate y recorrer la enorme circular de 130 kilómetros que recorre la Gran Vuelta Valle del Genal, recorriendo los 15 pueblos de este espectacular valle malagueño. La vuelta a Prado del Rey la realizaron por Cortes de la Frontera, Grazalema y El Bosque. Casi nada.
Para Pedro y Víctor lo más duro ha sido el sueño acumulado. La primera noche no durmieron nada, se extraviaron al romperse el GPS, tuvieron que confiar en sus móviles para orientarse y a Víctor se le rompió uno de los bastones. La segunda noche se permitieron 1 hora de sueño en una parada de autobús en Genalguacil tras rompérsele a Pedro su frontal. La última noche, llegando a Jimera de Líbar, optaron por descansar media hora y a esas alturas la falta de sueño les empezó a pasar factura. “Empecé a tener visiones, yo era consciente de que no eran reales pero estaban ahí: una roca que parecía un tigre o una rama de árbol que confundí con una mujer. En un momento dado, subiendo la montaña hacia Cortes de la Frontera, creía que estábamos andado entre unas casas”, relata Víctor. “Poco después decidimos dormir cinco minutos junto a un fuente y fue como si el cuerpo se reseteara, porque después de eso estábamos muy frescos y pudimos hacer el último tramo de la prueba del tirón”, puntualiza Pedro.
Ambos entraron a las dos de la mañana en Prado del Rey tras casi 72 horas seguidas corriendo. Allí les esperaba la hija de Pedro, que los trajo de vuelta a San Pedro porque al día siguiente los dos fueron a trabajar como cualquier otro día, demostrando que están hechos de otra pasta.
Estos dos sampedreños están acostumbrados a recorrer grandes distancias cuando se preparan para alguna competición de trail running. “Justo después del desconfinamiento salimos de la playa de San Pedro hacia la Sierra Palmitera, coronamos la cima de estas montañas, el Encinetas, y desde allí enfilamos a la Sierra de las Nieves, subimos al cerro Alcojona, luego la Alcazaba e hicimos noche en el Torrecilla. Al día siguiente bajamos por el Cerro Corona hasta Istán, subimos a la Concha en Sierra Blanca y de allí bajamos hasta Marbella. En total 100 km en dos días”, explica Pedro con la naturalidad con la que otro explicaría su paseo por la Senda Litoral.
Pedro y Víctor ya están recuperados del 8 Andaluz, pero a ambos ya les ronda por la cabeza otro reto inédito: subir del tirón las catorce cumbres (vértices geodésicos) del Parque Natural de Grazalema. Casi nada. Estos chicos no aprenden.