Ya consta como perteneciente al patrimonio municipal. El Ayuntamiento ya es propietario de la finca de Puerto Rico Alto, tras pagar 3.057.000 euros por el 50% de los 340.000 metros cuadrados que pertenecían hasta ahora a la familia Martínez Higuero. De este modo, tras el anuncio este verano de la ejecución del expediente de expropiación forzosa de este espacio verde ubicado en la falda sur de Sierra Blanca, se ha llegando a un acuerdo en el justiprecio con la familia Martínez Higuero y el Ayuntamiento ya es dueño de pleno derecho de Puerto Rico Alto.
Falta Puerto Rico Bajo, donde tradicionalmente se ha llevado a cabo durante muchos años la fiesta del Tostón. “Ya hemos llegado a un acuerdo con Alain Chatillon, dueño de la Sociedad Manzah al Kaïd Ltd, cuyo principal activo es el terreno de Puerto Rico Bajo. Vino la semana pasada a Marbella desde Méjico y cerramos el acuerdo de compra de la parcela por 600.000 euros”, explica Mario Ruiz, director general de Alcaldía.
Ruiz ha sido la persona encargada de llevar todas las negociaciones tanto con los dueños de Puerto Rico Alto como Bajo. “El objetivo era recuperar estos terrenos catalogados como Sistemas Generales para que pertenezcan a todos los marbellíes”, explica.
Queda un fleco para que se formalice la compra venta de Puerto Rico Bajo: “resulta que la sociedad Manzah al Kaïd Ltd no tiene ni CIF, con lo que los abogados que ha contratado Chatillon están haciendo las gestiones para conseguir el CIF y así podremos hacer la trasferencia bancaria”, señala el director general de Alcaldía. Ruiz calcula que Puerto Rico Bajo formará parte del patrimonio municipal antes de fin de año.
MAR PURO, OKUPA U ONG
Actualmente, parte del terreno de Puerto Rico Bajo (justo donde tradicionalmente se celebraba el Tostón) está ocupado por una supuesta ONG llamada Mar Puro. Este colectivo acotó el acceso a la finca y pretende poner en marcha un centro de reconexión con la naturaleza. Su portavoz, Karan Juerros aseguró a este medio que tiene un contrato temporal que se firmó con la propiedad de la parcela el 10 de mayo 2021. “Los abogados de Alain Chatillon nos han asegurado que ya han notificado a la supuesta ONG que deben abandonar ya Puerto Rico Bajo. De hecho, nos aseguraron que el contrato era para un mes, con lo que tendría que salir en breve de allí”, explica Mario Ruiz.
El director general de Alcaldía ha asegurado a El Periódico de Marbella que, en el caso de que Mar Puro siga ocupando ilegalmente Puerto Rico Bajo cuando se formalice la compra de la parcela, “se le denunciará para que se vaya. Además al no ser morada, no vivir en ese espacio, los plazos para echar a la ONG s son más rápidos”.
Guardas del cortijo de Puerto Rico
Uno de los puntos delicados y sensibles que atañen a la compraventa de Puerto Rico Alto son los actuales habitantes del cortijo de Puerto Rico Bajo, una antigua y notable edificación ubicada bajo el tajo travertino. El cortijo fue en su momento propiedad del conocido y polémico doctor Félix Jiménez Ledesma, el doctor de los pobres. Vivió unos años en este paraje espectacular de Sierra Blanca y, según explica la profesora universitaria Lucía Prieto en su artículo Félix Jiménez de Ledesma: El Médico de los Pobres. Un reformista en Marbella, “allí proyectó la construcción de un sanatorio antituberculoso que intentó construir en las faldas de la Sierra Blanca, en un paraje privilegiado, dotado de su propio manantial”. Sin embargo, Jiménez Ledesma estaba enfrentado con los responsables de la Marbella Iron Ore Company el camino transcurría paralelo al trazado del ferrocarril de la mina de hierro y, por tanto, necesitaba de la construcción de un paso a nivel para cruzar la vía férrea. Algo que la compañía inglesa no autorizó y nunca se puso en marcha el sanatorio.
Jiménez Ledesma murió hace poco más de 100 años y los terrenos acabaron en manos de las familias Arias Salgado y Martínez Higuero quedando a cargo del cuidado diario del cortijo una familia de guardeses que lleva décadas viviendo en Puerto Rico. Cultivan una pequeña huerta, no tienen luz, el agua la obtienen de un manantial y mantienen la edificación lo mejor que pueden. Desde el Ayuntamiento han asegurado que dejarán a esta familia seguir con la vida que llevan y no les obligarán a abandonar el cortijo. Seguramente son los últimos serranos de la vertiente marbellí de Sierra Blanca, viviendo casi como lo hacían los antiguos serranos a apenas un kilómetro de las grandes mansiones de La Montúa.
Una vez se formalice la compra de Puerto Rico Bajo, el Ayuntamiento será el propietario de 400.000 metros cuadrados de una de las zonas verdes más bellas de Sierra Blanca. Desde el Consistorio aseguran que se convertirá en un parque forestal para el disfrute público de los ciudadanos. Se intervendrá lo justo y necesario para adecentar senderos y dotar al valle de los equipamientos periurbanos precisos. De hecho, según aclara Mario Ruiz, la delegación de Medio Ambiente ya está diseñando el proyecto de parque forestal que se financiará con fondos europeos.