El Órgano del Sol Mayor cumple cincuenta años con un concierto muy especial que tendrá lugar esta tarde a las 19.45 en la Iglesia de la Encarnación. Esta ocasión tan especial contará con la presencia del “padre” del Órgano, Michael Reckling, quien ha sido hasta 2004 conservador y organizador de conciertos y primer organista del Sol Mayor. También participará Albert Blancafort, organero de Barcelona e hijo de Gabriel Blancafort, constructor del Órgano del Sol Mayor. Por último, esta jornada musical contará con la participación de Javier Villero, organista de la parroquia desde 1982 y único conservador del órgano de la Encarnación desde 2004.
En el concierto, que organiza la Asociación de Amigos del órgano del Sol Mayor, se tocarán diversas piezas de Bach, del propio Reckling, La Misión de Ennio Morricone, etc.
HISTORIA DE UN INSTRUMENTO ÚNICO
Según se explica en la página web http://www.organo-del-sol-mayor.com/, los grandes impulsores de la construcción del Órgano del Sol Mayor fueron Michael Reckling y monseñor Rodrigo Bocanegra. En 1970, Reckling, gran entusiasta de los órganos de tubo, recala en Marbella y visita la iglesia de la Encarnación, donde sólo encuentra un coro alto sin órgano, ya que el que había sido destrozado en la guerra civil.
Pronto el joven alemán y el emprendedor monseñor coinciden en la necesidad de que la iglesia cuente con un órgano de tubo y, gracias a la ayuda de personalidades de la época como José Banús Masdeu, Ignacio Coca García, José Antonio Girón de Velasco, Alberto Monreal Luque, Fernando Soto y Domecq, José Luque Manzano, Diego de Cossio y a las gestiones de monseñor Bocanegra el proyecto se hizo realidad. El 29 de diciembre de 1971 fue firmado el contrato con los maestros organeros Gabriel Blancafort y Joan Capella y su equipo de Collbató (Barcelona) para la construcción de uno de los más importantes órganos de tubos del país.
Las obras de construcción del órgano fueron más largas de lo esperado, sobre todo tras la muerte de monseñor Bocanegra en 1973 y por la falta de fondos. Reckling consiguió la ayuda de Maite Soto Domecq y de la Baronesa Terry von Pantz. Con el apoyo del entonces párroco, Francisco Echamendi, la obra prosiguió y, finalmente, el 29 de diciembre de 1975 Marbella y sus numerosos visitantes vivieron un inolvidable concierto de inauguración del Órgano del Sol Mayor, construido casi en su totalidad.
De los 5.000 tubos proyectados inicialmente faltan, 50 años después, 856.