Hace casi tres años, en mayo de 2021, el estadio municipal de fútbol tuvo que ser cerrado por el riesgo que suponía debido al mal estado en que se encontraba. A partir de ese momento, el Ayuntamiento se embarcó en un largo proceso para encontrar una solución viable que permitiera demoler el estadio y construir uno nuevo. Esta es la solución: el futuro estadio municipal lo construirá la fundación del Marbella FC, costará entre 115 y 130 millones de euros, tendrá una capacidad de 10.000 espectadores y un aparcamiento con 1.000 plazas.
Este jueves 4 de abril la alcaldesa Ángeles Muñoz ha comparecido con Esteban Granero, el representante de la empresa Best of You, la entidad que gestiona el Marbella FC. La regidora ha elegido, sin que exista concurso público, a esta empresa para que se encargue de construir el estadio mediante una concesión que se alargará hasta los 75 años.
A cambio de demoler el viejo estadio y edificar el nuevo, el proyecto del futuro equipamiento deportivo contempla la construcción de un hotel y una zona comercial. A la explotación de estos dos espacios, y de parte de los 1.000 aparcamientos previstos se une el uso del estadio más allá del deportivo, ya que las Normas Urbanísticas recientemente aprobadas permitirán la celebración de eventos no sólo deportivos, como conciertos y cualquier tipo de acontecimiento multitudinario.
Por otro lado, queda en el aire el futuro de las pistas anexas del Serrano Lima. No sé han mostrado imágenes renderizadas ni planos del nuevo estadio.
Según han asegurado en su comparecencia ante los medios de comunicación, la demolición del viejo estadio comenzará después del verano y se espera que el nuevo equipamiento deportivo esté terminado en 2026.
NADA DE UNA FINANCIACIÓN ENTRE VARIAS ADMINISTRACIONES
Sobre el modelo privado que ha elegido el Ayuntamiento para construir el futuro estadio, desde el partido socialista ya en enero de este año presentaron una moción para instar a la Diputación de Málaga y a la Junta de Andalucía a aportar fondos para la construcción del nuevo estadio.
En ese momento, la concejala Isabel Pérez explicó que “la mejor opción” para disponer de esta infraestructura deportiva era una “financiación pública entre distintas administraciones” para que pueda ser de “todos los ciudadanos”. “No es nada raro lo que planteamos, así se ha hecho en otros municipios”, añadió. Pérez recordó que el estadio de La Rosaleda, en Málaga, es propiedad del Ayuntamiento, de la Diputación y de la Junta, a partes iguales, desde los años 90, o que la administración autonómica ha puesto dinero en los últimos años para modernizar campos de fútbol, por ejemplo, en las provincias de Cádiz y Jaén.