Beermen Z es el nombre que reciben Fran, Paco y Manuel cuanto se enfundan sus faldas escocesas para recaudar dinero con fines solidarios. Durante seis días, del 9 al 14 de agosto, se enfrentarán al reto benéfico de ir desde San Roque al Pico Mulhacén y volverán al punto de partida con el objetivo de recabar fondos para dos ONG´s: Pequeños Héroes Sin Capa y Apoyo Mutuo San Roque. “Estamos poniendo todo de nuestra parte para que este nuevo desafío sea todo un éxito. Para hacerlo más fácil, cualquiera puede ayudar ingresando una cantidad de dinero a través de Bizum al teléfono 655 910 006”, explica el marbellí Fran Viegas.
Para lograr el desafío, alternarán días con recorridos en bici de más de 100 km con carreras a pie de más de 50 km. El itinerario partirá de San Roque a Antequera en bici. De allí a Granada también en bicicleta. De la capital granadina subirán al Mulhacén y bajarán hasta Capileira corriendo. Desde este pueblo alpujarreño irán en bici hasta la Cala de Mijas. Desde aquí correrán hasta Estepona y, por último, irán corriendo desde Estepona hasta San Roque.
Puede parecer un reto exigente, y lo es, pero no más que otros en los que los Beermen Z han participado, ya que estos tres corredores han participado en las principales competiciones de running de Málaga y Andalucía como los 101 km de Ronda, las 100 Millas Sierras del Bandolero, etc. De hecho, Fran Viegas, Manuel Tenllado y Paco Contreras se conocieron y crearon los Beermen Z compitiendo en estas carreras de larga distancia.
«Tras las competiciones, comenzamos a juntarnos para tomar cervezas, surgió el nombre y se creó de forma espontánea los Beermen Z. Un día Paco vino con una falda escocesa, nos pareció muy gracioso y la adoptamos como nuestro uniforme”, relata Viegas.
Con el tiempo, los Beermen Z se han convertido en un elemento esencial, pintoresco y habitual de cada carrera de ultrafondo, ya que actúan de corredores escoba: van los últimos animando a aquellos corredores que van más desfondados o al borde de la retirada y, en muchos casos, consiguen que cojan fuerza anímica y acaben la carrera. De este modo, se han hecho muy conocidos en el mundillo de los corredores de carreras de larga distancia.
Hace unos años decidieron emplear esa pequeña fama para promover desafíos solidarios. Como cuando corrieron 1.500 kilómetros desde Francia hasta Marbella y como el que enfrentarán en unos días. “Hicimos un llamamiento a las ONG´s de Marbella y de otros lugares y, al final, nos contactaron de dos colectivos de San Roque: Pequeños Héroes sin Capa y Apoyo Mutuo San Roque, dedicados a niños con cáncer y enfermedades raras y a ayudar a personas con necesidades”, explica Viegas.