Aún no se sabe cuanto será el aumento en el cobro del recibo de la Basura que gestiona la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental en nombre de Ayuntamientos como el de Marbella. El portavoz del PSOE en la Mancomunidad, Víctor Navas, ha defendido el voto en contra de la nueva ordenanza de la basura señalando que se trata de una subida de más del doble del precio de la tonelada, es decir, de 43 euros se pasará a pagar 85,93 euros por tonelada. Queda por saber cuanta de esa subida el Ayuntamiento de Marbella traslada al recibo de los ciudadanos.
El coste de la gestión de los residuos lo paga cada Consistorio a la Mancomunidad en función de las toneladas que lleva al Complejo Medioambiental de Casares. Por tanto, la subida que experimentará la factura de la Basura dependerá de las toneladas que genere cada municipio y cómo cada Ayuntamiento lo hará repercutir a los ciudadanos.
La Asamblea de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, reunida esta mañana en una sesión ordinaria, ha aprobado la reactualización de la tasa para el tratamiento de los residuos sólidos en el Complejo Medioambiental de Casares y en las plantas de transferencia.
Esta situación viene motivada por la exigencia de la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular de 2022, que a su vez incorpora la Directiva Marco de residuos 2008/98/CE del Parlamento Europeo, que recoge que las tasas por este concepto deben cubrir todos los costes de gestión del servicio.
Así, la Ley 7/2022 de 8 de abril de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, ha explicado Juan Olea, delegado de Medio Ambiente, “tiene como objetivo reducir al mínimo los efectos negativos de la generación y gestión de los residuos en la salud humana y el medio ambiente, teniendo en cuenta un uso eficiente de los recursos. Todos los ayuntamientos deben aplicar esta subida ya que hay que cumplir la Ley de Residuos de Suelos Contaminados que, a su vez, incorpora la Directiva marco de residuos de la Unión Europea”.
Por tanto, toca pagar más ya que la finalidad de este impuesto es reducir la generación de residuos y su depósito en vertedero; fomentar la reutilización y el reciclado de los residuos; dar prioridad a la fracción orgánica e impulsar la educación ambiental.
Como han explicado en un comunicado desde Mancomunidad, “esta reactualización de tasas va a servir para que los ciudadanos tomen conciencia de la importancia de separar los residuos en origen. Se pagará más por depositar más residuos en vertedero, y al vertedero solo van aquellos residuos que no son reciclables. Es decir, si los ciudadanos separan correctamente los residuos en sus contenedores adecuados (envases al amarillo, papel-cartón al azul, vidrio al verde, orgánico al marrón) sólo lo que quede en el gris será lo que irá al vertedero, abaratando el coste”.
La nueva ley recoge la premisa de «quien contamina paga», es decir, establece un sistema de pago basado en la generación real de basura de cada ciudadano y su grado de participación con incentivos en el caso de que se recicle adecuadamente o se genere menos residuos.
En la actualidad, según el estudio de ‘Las tasas de residuos en España en 2022’ elaborado por la Fundació Ent, cada habitante paga de media 61,15 euros por esta tasa, es decir, un total de 2.080 millones de euros anuales. Sin embargo, este volumen no cubre el actual coste de recogida, que la Fundación Para la Economía Circular sitúa en casi 2.900 millones anuales y eleva hasta los 3.700 millones de cara a 2035 para cumplir con la nueva ley (que transpone una normativa europea) y que obliga a mejorar el sistema de recogida, tratamiento, reciclado y reutilización de basura.