La portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Marbella, María García, ha reclamado al equipo de gobierno que se instalen bolardos o cualquier otro instrumento de protección en la avenida Miguel Cano para evitar que vuelvan a producirse accidentes como el atropello múltiple del pasado 19 de julio.
“Van a llegar tarde, porque no podemos evitar lo que ocurrió y que pudo ser aún más dramático”, ha señalado la edil, quien ha añadido que aun así el objetivo ahora tiene que ser “que, al menos, no se repitan hechos similares”.
La concejal de la formación naranja ha detallado que se trata de una reivindicación “que nos han trasladado comerciantes de la zona”, con el fin de mejorar la seguridad vial en esta calle tan concurrida del centro de Marbella, tanto por vecinos como por turistas.
“Es una vía donde además existen muchas terrazas y es necesario protegerlas de alguna manera”, ha insistido María García, quien ha lamentado que “no se haya actuado antes para atender las necesidades de los comerciantes y hosteleros”.
Ha insistido, una vez más, en la importancia que tiene para un cargo público “escuchar a la ciudadanía para poder resolver sus problemas” y ha recordado que esta es la forma de hacer política que tiene Ciudadanos.
Por ello, la edil trasladará esta petición al equipo de gobierno en el pleno ordinario de este próximo viernes con el objetivo de que “se pueda solucionar este problema” ya que considera que “sería muy grave que volviera a ocurrir algo similar”.
LIMPIEZA DE PLAYAS
Durante la sesión plenaria, también en el turno de ruegos y preguntas, María García abordará otros asuntos como la necesidad de que la Delegación de Playas “refuerce el dispositivo de retirada y limpieza de algas” en el litoral de Marbella y San Pedro Alcántara.
La concejal considera que “son muchas las playas del municipio que no presentan su mejor aspecto” en plena temporada alta veraniega y con una gran afluencia de visitantes.
Ha reconocido que se está limpiando las algas, pero “es necesario ampliar” este servicio, dada la gran proliferación de esta especie invasora y la “mala imagen” que ofrece tener una playa sucia.