En el marco del proyecto Nendo Dango, Produnas Marbella tiene previsto para el próximo sábado, 24 de febrero de 2024, un evento con el que repartir más de 1.000 bolas de semillas en la duna El Pinillo, entre las 11 y 13 horas.
Estas bolas contienen semillas autóctonas, provenientes de la vegetación silvestre y ha sido un esfuerzo conjunto entre los alumnos del IES Bahía Marbella, el patrocinador LG Electronics España y Cantueso Natural Seeds de Córdoba.
Va a ser una experiencia lúdica e innovadora, ya que estas bolas de arcilla no van a ser enterradas, sino van a germinar en el suelo arenoso de la duna. En días y semanas venideras se comprobará el estado de las bolas de arcilla “in situ”, ya que es un proyecto científico para implementar nueva biodiversidad en entornos dunares sin utilizar agua.
El primer entorno dunar elegido es la duna El Pinillo, que se encuentra en la playa, por debajo del Arco de Marbella. “Será un evento emocionante, ya que es la primera vez que un entorno dunar va a albergar estas bolas y por ello se llama Proyecto pionero de ensayo. Como doble testigo, se prevé que se colocarán algunos protectores que proporcionarán cierta humedad a las bolas y se introducirán semillas directamente en la arena, alrededor de las estacas de madera, que han demostrado ser proveedores de humedad”, explica Susanne Stamm, presidenta de Produnas.
NENDO DANGO: CREAR DIVERSIDAD EN ENTORNOS DUNARES
Consiste en hacer pequeñas bolas de arcilla mezcladas con semillas, que se esparcen sobre el terreno sin necesidad de arar o remover la tierra. Estas bolitas actúan como protectores naturales para las semillas, proporcionándoles un entorno favorable para germinar al retener humedad y protegerlas de aves y otros depredadores.
La técnica del Nendo Dango ha demostrado múltiples beneficios para la naturaleza y la agricultura. Al no perturbar el suelo, se preserva su estructura y biodiversidad microbiana, contribuyendo a la conservación de los ecosistemas naturales. Además, al reducir la necesidad de maquinaria y productos químicos, se promueve una agricultura más amigable con el medio ambiente y se disminuye la erosión del suelo.
Implica la creación y dispersión de bolas de arcilla rellenas de semillas en áreas degradadas o ecosistemas vulnerables.