Esta a escasos kilómetros de la Costa del Sol, pero como si estuvieran en planetas diferentes. El valle del Genal sufre un problema muy grave de falta de médicos para atender a la población que habita en los pueblos de este espectacular rincón natural de la provincia de Málaga. Hasta el punto de que los alcaldes de Jubrique y Genalguacil, Alberto Benítez y Miguel Ángel Herrera, han hecho un llamamiento a través de las redes sociales para denunciar el abandono que sufren por parte del Distrito Sanitario de la Serranía de Ronda.

“Lo que estamos padeciendo en el valle del Genal es un problema histórico, no es algo nuevo, y la carencia de equipamientos y personal sanitario es una pata más de un problema estructural: el desmantelamiento de los servicios públicos en el medio rural de la provincia”, denuncia Herrera.

Desde Genalguacil y Jubrique pusieron el grito en el cielo cuando redujeron a la mitad los días en los que un médico da consulta en estos dos pueblos blancos. Pidieron explicaciones al gerente del Hospital de Ronda, “y nos dijo que no había médicos disponibles, que no los encontraban y que si nosotros les buscábamos alguno pues que lo contratarían, por eso hicimos un llamamiento en las redes sociales hace unos días y les hemos pasado el contacto de seis médicos que se han ofrecido a venir al valle. Pero no nos han dado una respuesta sobre si han contratado a alguno de ellos”, explica el alcalde de Genalguacil.

Los alcaldes de Jubrique y Genalguacil, segundo y cuarto desde la izquierda, junto al consultorio de Genalguacil. Foto: José Antonio Gallardo.

La situación sanitaria de Jubrique y Genalguacil, que cuentan con 1.200 habitantes entre los dos pueblos, es especialmente precaria teniendo en cuenta que el centro de salud más cercano está en Algatocín, a media hora en coche. Este ambulatorio atiende a ocho pueblos de la zona. Allí también se ubica la única ambulancia que hay en la comarca, “con lo que si hay dos infartos, uno de ellos se muere, porque el hospital de Ronda está a una hora en coche”, sentencia Miguel Ángel Herrera.

Por otro lado, el alcalde de Genalguacil ha mostrado su preocupación por el abandono que sufren por parte de las instituciones en la gestión del coronavirus. “Aquí hemos tenido dos casos positivos y no vinieron a hacerles ni el PCR, hasta el punto de que desde Ronda me dijeron que me pusiera un traje EPI y que llevara a uno de los afectados al hospital”.

Los dos alcaldes del valle del Genal han querido además resaltar las numerosas necesidades que tiene la comarca, que van más allá de las puramente sanitarias: “las carreteras que van a Estepona o Algatocín llevan más de un año sin un adecuado mantenimiento. De hecho, a Genalguacil no pueden ir los autobuses, por el estado en que está la carretera, debemos ser el único pueblo de Málaga que le pasa eso”, denuncia el alcalde de Genalguacil.

El tranquilo valle del Genal es un auténtico tesoro natural y etnológico que vive de espaldas a la bulliciosa Costa del Sol. Acaban de arruinarles su temporada alta que es ahora, cuando los castaños se tiñen de marrón en la conocida Primavera de Cobre atrayendo a miles de senderistas y visitantes. Mientras instituciones públicas y grandes expertos abogan por combatir del despoblamiento en el medio rural, los alcaldes del Genal reclaman más medios, recursos e infraestructuras dignas.

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