Sierra Canucha, la gran desconocida de la Sierra de las Nieves

La Sierra Canucha es la desconocida hermana pequeña de Sierra Blanca. Canucha conforma una uniforme y afilada arista caliza de 2.5 kilómetros de largo que cubre las espaldas norteñas de Sierra Blanca. Pertenece al futuro Parque Nacional de la Sierra de las Nieves y su principal cima, el Picacho de los Castillejos, se alza a 1.238 metros de altura.

Tipo: semicircular

Dificultad: medio-alta

Duración: 6 horas más o menos dependiendo del ritmo de cada uno

Distancia: 12 Kilómetros

Desnivel: 800mts de ascenso 

Agua:  fuente a una hora del inicio en el pilón del Pozuelo (se seca en verano).

Recorrido fotográfico:

Esta propuesta senderista circunvala toda Canucha partiendo desde el bello enclave de Juanar. Dejamos el coche junto al Refugio, actualmente cerrado. Volvemos por la carretera durante unos trescientos metros, con las precauciones debidas, y encontraremos a nuestra izquierda un poste de señalización que indica el inicio de la conocida como Senda de José Lima.

Este camino es una interesante ruta circular de unos 5km que permite recorrer parte de la zona Norte de Sierra Blanca. Nosotros recorreremos la primera mitad de esta Senda. Tras cruzar el arroyo de Juanar iniciamos una subida constante por un sendero bien pisado que nos aúpa en poco tiempo por encima de la carretera de acceso a Juanar.

En una media hora larga nos situamos junto al Mirador de Los Cuchillos, punto importante de esta ruta, ya que desde aquí vemos hacia el Este como desciende la cañada del Pozuelo y el sendero que conduce, en la lejanía, a la Caseta de Pula que se encuentra ubicado en un pequeño pinar, por donde volveremos en la parte final de esta ruta.

Continuamos por el sendero que nos acerca en un par de minutos al pilón del Pozuelo, que en verano suele estar seco. Resta una nueva subida de unos quince minutos hasta alcanzar el Puerto del Pozuelo. En este punto dejamos la Senda de José Lima, que continúa de frente hacia el Suroeste, y enfilamos por un marcado sendero en dirección Norte hacía el inicio de la Sierra Canucha.

Tras un ascenso de unos quince minutos, en el que podemos disfrutar de excelentes vistas del pinsapar del Pozuelo que se ubica en el cerro Gurapalo, llegamos al Puerto de Los Merenderos. En este punto, sobre la cota de los 1.200 metros, se abre una espectacular panorámica de la Sierra Canucha y su pinsapar. Desde el Puerto tenemos a nuestra derecha una vereda que nos asciende en unos 10 minutos al Picacho de los Castillejos que, con 1.238 metros, es la cota más alta de Sierra Canucha.

Comienza ahora el tramo más montañero y disfrutón de esta ruta: la travesía a media ladera de las sucesivas cañadas que conforman Sierra Canucha. Nos sumergimos en un frondoso pinsapar por un sendero bien pisado en un ambiente más bien alpino. Cruzamos diversos barrancos bajo los espectaculares tajos calizos de los Cuchillos de Canucha. Durante aproximadamente una hora transitamos por las cinco cañadas que conforman este tramo, disfrutando de las grandes vistas a la frondosa Dehesa Bornoque, el valle del Río Verde y la Sierra de las Nieves con la mole caliza del Torrecilla (1.919 metros).

El sendero acaba subiéndonos a la divisoria de la sierra, dejamos atrás el cónico cerro Tejuela y ganamos vistas, tras ascender al puerto de las Encinillas, sobre el la sierra Alpujata y el valle de Pula, cuya Caseta se otea muy abajo. Para llegar a la Caseta tenemos que seguir por el sendero hasta entrar en el valle de la Cueva Santa de Monda, cuyo carril de acceso vemos abajo en la cañada. Una vereda nos conectaría con la Cueva pero optamos por continuar hasta Puerto Negro, donde está el sendero roto y empinado que nos descenderá hasta la Caseta de Pula.

La bajada pondrá a prueba nuestras rodillas ya que el sendero es empinado, bastante roto y con piedra suelta. Tras un descenso lento y trabajoso de cerca de una hora nos plantamos en un pequeño pinar donde se ubican las ruinas de la Caseta de Pula. Podemos tomarnos un merecido descanso en el suelo alfombrado de pinocha antes de afrontar otra de las duras pruebas de la jornada: el sube y baja del sendero que nos situará de nuevo en la Senda de José Lima.

Para ello debemos descender hacia el Oeste desde la Caseta por una zona despejada buscando una vereda que se convierte en sendero. Este camino nos hace rodear un total de cuatro cañadas que debemos subir y bajar secuencialmente, recorriendo la Sierra Canucha de nuevo pero por su vertiente Sur. Un auténtico rompepiernas. Al final, nos situaremos justo bajo el Mirador de los Cuchillos, al que subiremos, superando un desnivel de unos cien metros por un tramo especialmente empinado y roto. Conviene subir sin prisa, al ritmo que nos permitan los pulmones.

Por fin, se termina el duro ascenso en el Mirador de los Cuchillos, un balcón espectacular de Sierra Canucha donde podemos tomarnos otro merecido descanso. A unos metros pasa la Senda de José Lima, por la que volvemos, repitiendo la parte inicial de la ruta, en descenso todo el rato, hasta volver al coche junto al Refugio de Juanar.

Esta es una ruta moderadamente dura. Sierra Canucha, la hermana pequeña de Sierra Blanca, es un territorio salvaje y con una personalidad alpina, cruzada por vertiginosas cañadas y afiladas aristas calizas que saciarán nuestra ansia senderista. Los caminos que se recorren son duros y, a tramos, empinados y rotos. Conviene, como siempre que se va al campo, ir bien pertrechado de agua, abrigo y tener bien estudiada la meteorología.